Contar con un ambiente laboral sano o positivo dentro de las organizaciones, no siempre está relacionado con ofrecer sueldos elevados y prestaciones que den una estabilidad a tus empleados, sino que va más allá, contemplando tanto el ambiente físico como emocional, determinado por la percepción que tienen los empleados, siendo una excelente estrategía para la retención de talento, contribuyendo en la productividad.
Los efectos de contar con climas laborales positivos también se harán sentir en las finanzas de la empresa. Y es que los beneficios de un entorno de trabajo positivo afectan diferentes dimensiones, obteniendo el máximo rendimiento de tu equipo.