Si bien una organización debe respetar las leyes y regulaciones con respecto a la salud y la privacidad de los empleados, puede ser un entorno en el que la comunicación y el apoyo médico sean claves para el bienestar de los colaboradores.
Contar con el asesoramiento de profesionales de la salud puede ser de gran ayuda para implementar estas medidas de manera efectiva.
¿Qué son las enfermedades de transmisión sexual?
Las enfermedades de transmisión sexual (ETS) son aquellas que se transmiten de una persona a otra a través del contacto sexual. Sin embargo, también puede transmitirse por una transfusión sanguínea.
Las ETS incluyen el virus de inmunodeficiencia humana
VIH, herpes, clamidia, papiloma, gonorrea, sífilis, entre otras. Algunas de estas enfermedades son asintomáticas por un largo tiempo, pero aún así pueden transmitirse.
Es importante mencionar que el contacto de piel a piel con una persona infectada puede detonar el contagio de una enfermedad, no necesariamente tiene que haber contacto con el órgano reproductivo para contraer la ETS.
Consejos para ayudar a prevenir una ETS en la industria
Afrontar el tema de la salud sexual en el entorno industrial requiere de un enfoque integral y sensible por parte de las empresas. Es importante implementar mecanismos de difusión de información entre los colaboradores de la empresa.
Entre las medidas que una empresa puede tomar destacan:
Políticas y programas de bienestar
Implementa políticas que promuevan un entorno de trabajo seguro y saludable, incluyendo la salud sexual.
Acceso a servicios de salud
Facilita el acceso a servicios médicos relacionados con la salud sexual, como pruebas de enfermedades de transmisión sexual, consultas ginecológicas, asesoramiento sobre planificación familiar y métodos anticonceptivos. Esto puede hacerse a través de acuerdos con proveedores de servicios médicos o mediante la organización de jornadas de salud en el lugar de trabajo.
Confidencialidad y privacidad
Garantiza la confidencialidad y privacidad de los empleados que buscan servicios relacionados con la salud sexual. Esto implica establecer políticas y procedimientos claros para proteger la privacidad de los empleados y garantizar que se respeten sus derechos.
Apoyo psicológico
Reconoce que la salud sexual también incluye aspectos emocionales y psicológicos. Ofrecer apoyo psicológico a través de servicios de asesoramiento o la derivación a profesionales especializados cuando sea necesario.
Evaluaciones y seguimiento
Realiza evaluaciones médicas periódicas que aborden también la salud sexual de los empleados. Estas evaluaciones pueden incluir pruebas de detección de enfermedades de transmisión sexual, evaluaciones de salud reproductiva y seguimiento de las necesidades de salud sexual de los empleados.
Realiza campañas de sensibilización y educación sobre salud sexual y reproductiva en el lugar de trabajo, mediante charlas, talleres o material informativo que aborden temas como la prevención de enfermedades de transmisión sexual, anticoncepción y planificación familiar.
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