Definitivamente los factores de salud son una fuente para
motivar, alterar o disminuir el desempeño de los integrantes de una empresa. Los elementos de riesgo psicosocial, el ambiente laboral, las condiciones físicas del área de trabajo, la presión, los horarios, son puntos que pueden afectar el rendimiento laboral. Asimismo, una plantilla de trabajadores con enfermedades será clave para los indicadores al respecto.
¿Qué es el rendimiento laboral?
El rendimiento laboral es el resultado de la ejecución de las tareas correspondientes a un puesto o posición dentro de una empresa que llevan a lograr los objetivos planteados para un individuo o un grupo de personas. Es el producto del trabajo en la búsqueda por cumplir una labor en tiempo y forma, cumpliendo con la calidad estándar requerida.
Para medir el rendimiento laboral se pueden emplear técnicas cuantitativas y cualitativas:
Cualitativas: mediante encuestas a líderes o gerentes sobre comportamientos específicos que tengan que ver con habilidades en particular.
Cuantitativas: a través de indicadores o KPIs medibles, por ejemplo, el número de piezas logradas en un periodo determinado de tiempo.
Dependiendo de la operación de cada empresa se podrán medir ciertos aspectos del desempeño de los trabajadores.
Características del rendimiento laboral
Para que sea funcional y viable el medir o tener noción de cómo es el desempeño de un grupo o de una persona hay que tener en cuenta ciertas características:
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Medible: debe poderse medir y tener indicadores.
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Relevante: los datos deben ser relevantes para la empresa.
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Estratégico: debe cumplir con objetivos de negocio.
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Multidimensional: deben considerarse diferentes factores.
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Comparable: debe haber forma de comparar entre grupos, áreas, lapsos de tiempo, etc.
Factores de salud laboral que afectan el rendimiento
Actualmente, los factores que más están afectando al rendimiento laboral son
los emocionales, el acoso y el estrés laboral. En el caso de una dimensión física los que más impactan son las adicciones, la obesidad, la diabetes y problemas cardiovasculares.
En su conjunto provocan que un grupo de trabajadores o la mayoría de la plantilla laboral presenten bajos índices de rendimiento, lo cual provoca pérdidas para la empresa, ya que habrá menor productividad, mayor rotación de personal, ausentismo, conflictos, accidentes, errores, entre otros.
Es importante que las empresas visualicen la relación directa entre rendimiento y salud, así podrán tomar acciones integrales que las ayuden.
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