3. Salud y bienestar:
Sin duda, con la
COVID-19 la salud es la mayor prioridad para las personas en todos sus ámbitos y, por ende, en el laboral es necesario que los colaboradores reciban atención, facilidades, información, campañas, entre otros factores, para impulsar la salud. Ligado a esto, la parte del
bienestar seguirá marcando la diferencia entre las empresas, ya que cada vez es más necesario que se generen
entornos de trabajo seguros y saludables.
4. Inclusión y no discriminación:
Este es un gran reto para las empresas, que tienen que
adaptarse a las tendencias mundiales sobre la no discriminación al momento de contratar y durante la convivencia en el ámbito laboral. Además de propiciar la
inclusión e igualdad.
5. Certidumbre y crecimiento:
Sin importar la actividad, área laboral o puesto, todos los trabajadores necesitan
certidumbre de lo que están haciendo, de que lo pueden proyectar a futuro, de lo que pueden planear con base en lo que su trabajo les brinda. Asimismo, es importante propiciar el
crecimiento personal y profesional de los colaboradores.
En
Occupational Health somos expertos en consultoría, diagnóstico e implementación de programas integrales de salud para las empresas.
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Fuentes consultadas:
https://www.oecdbetterlifeindex.org/es/countries/mexico-es/
https://imco.org.mx/practicas-vida-y-trabajo/
https://www.eleconomista.com.mx/capitalhumano/Balance-entre-trabajo-y-vida-personal-una-agenda-pendiente-en-Mexico-20200601-0055.html