Si bien la salud mental es un aspecto fundamental para cualquier país, en México apenas se empieza a tomar una mayor conciencia y a generar estrategias. Sin embargo, hay muchos retos por delante tanto para el sector público como privado. Y es que uno de los principales problemas era que en décadas anteriores se pensaba que las acciones deberían venir solamente del gobierno, pero ahora hay una corresponsabilidad por parte de las empresas.